Representaciones del alumnado de Teatro
Para una asignatura como la de Teatro grecolatino, la situación excepcional que se ha vivido desde marzo de 2020 ha supuesto un verdadero reto. Es una asignatura que se puede afrontar teóricamente, pero como realmente se aprende y se disfruta es en su forma práctica. Por supuesto se han trabajado contenidos teóricos fundamentales y se han hecho lecturas (Antígona, Anfitrión y La casa de Bernarda Alba, entre otras) pero debíamos afrontar la escena de una forma más cercana, por lo que propuse a los diferentes cursos lo siguiente: la elaboración de obras propias.
Debían ceñirse a ciertos requisitos: los protagonistas serían dioses, habrían de aparecer sus opiniones y sentimientos y presentar una trama narrativa. Además, los guiones debían incluir todos los conceptos básicos: división en actos y escenas, incluir acotaciones y dejar constancia de la dirección escénica. Bajo estos criterios, la liberad era máxima.
Los resultados han sido verdaderamente interesantes. Se han presentado verdaderos monólogos breves que han intentado reflejar escenas míticas en forma de parlamento pero también se han presentado versiones actuales, modernas y revisadas de los mitos clásicos.
Las alumnas Marta y Lucía M. nos presentan en su trabajo a una Dafne y a una Perséfone reflexivas y conscientes de su situación, donde desde una perspectiva feminista tratan con seriedad la violencia de género.
Juanma y Mario C. han ideado una interesante metáfora sobre la importancia de la estrategia por encima de la fuerza bruta. Ponen en el escenario a Atenea y Ares jugando una partida de cartas donde las distintas jugadas representan las guerras humanas.
Alba y Claudia revisan el castigo de Medusa impuesto por Atenea y tras varias peripecias, ambas acaban enamoradas.
Lucía R, Ana y Andrea L. han traído al futuro a las antiguas Moiras. Estas diosas de la muerte son invitadas a un programa de televisión regido por la diosa Fama donde se les entrevista sobre su trabajo y se les sonsaca los más oscuros secretos de su profesión.
Como último ejemplo, María R., de una forma más regionalista, nos presenta a Hera en el aeropuerto de Sevilla, donde conoce a los locales y su cultura. Sin embargo, al final llegará a una conclusión vital ¿Divorcio de Zeus?
Todas las obras han ido acompañadas de guiones de luces y de sonido, donde hemos aprendido conceptos como entrar, subir, o bajar luces y luz cenital, frontal o nadir. Son ellos y ellas mismas quienes han debido controlar luces, sonido, telón y cámara en cada una de las obras del resto de compañeros, por lo que se aprecian fallos en la luz, movimientos de cámara extraños o telones con movimientos acelerados. Todo fruto de la inexperiencia, pero que proporciona una factura casera y cariñosa.
Por último, para trabajar el cuerpo y la interpretación se han practicado múltiples ejercicios de improvisación teatral, limitando al máximo el contacto, que han servido para perder el miedo escénico y controlar la expresión corporal.
Os dejo algunas grabaciones para que podáis echar un vistazo a estos trabajos que no se han podido representar con público. En ellas aparecen Hera bailando sevillanas, la ninfa Eco cantando a petición del público, Apolo haciendo las paces con Cupido, Némesis lamentando sus desdichas y la historia de Pandora. Todo ha sido gestionado y creado por el alumnado con bastante desenvoltura. Les agradezco desde aquí su motivación y dedicación. Espero que os guste.